Jhosman Barbosa
Si EE.UU. no golpea algún lugar del Caribe, demostrará que ya no es una potencia y no es un padrino fiable a sus élites nacionales con inversión en la subregión ni de las élites de tales países.
Escríbenos: infostrategic-culture.su
La velocidad con la cual cambian los acontecimientos implica que este análisis quizá pierda peso, de suceder hechos que rebasan la posibilidad del diagnóstico. Sin embargo, es necesario atreverse a pensar los actuales eventos en el Caribe y Venezuela.
Es relevante, aunque parezca obvio, señalar que el Caribe no es sólo Venezuela. Está integrado por doce países independientes y siete dependientes, del tipo Puerto Rico. Se divide en: continental, integrado mediante las costas de México, Belice, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia y Venezuela, Guyana, Surinam y Guyana Francesa. (Aunque tiende a descartarse estas tres últimas como caribeñas) Antillas menores, en las que se encuentra: Antigua y Barbuda, Dominica, Granada, San Cristóbal y las Nieves, San Vicente y Granadas, Santa Lucía, Trinidad y Tobago. Antillas mayores; Cuba, Haití, República Dominicana, Jamaica y Puerto Rico; estas últimas se conocen como Caribe insular.
Aunque nunca se le integra de tal manera, la costa sur de EE.UU. se inserta en el Caribe con los Estados de Florida, Mississippi y Texas.
1. EE.UU.: un animal herido
Cuando Estados Unidos de América entra a posicionarse discursiva y militarmente en el Caribe, lo hace luego de la celebración de los ochenta años de la derrota del nazismo en China en septiembre; reunión donde pese a las presiones arancelarias de Donald Trump a India y China en relación con la compra de hidrocarburos a Rusia y las disputas fronterizas entre China e India, las tres naciones fundadoras de RIC -que se transformó en BRICS- se reunieron con elocuentes y fraternos abrazos; porque además de ser una relación comercial, no sin tensión a veces, hay cercanía entre los presidentes que llevan sus gobiernos en una larga gestión. India llevaba varios años sin ir a China y recientemente Vladímir Putin estuvo de visita oficial en India.
Esta cercanía incomoda a las intensiones de la potencia en declive, EE.UU., razón por la cual dentro de su estrategia de corto y mediano plazo está el retorno a su área de injerencia natural de manera sólida, en un claro fortalecimiento y revival de la Doctrina Monroe, cimentada en su National Security Strategy - White House, de noviembre de 2025. Un documento al que se puede acceder en la página oficial de la Casa Blanca y consta de 33 páginas. Allí no es Rusia la prioridad y China es una intensión en el ánimo de la contención, pero lo que es fundamental y que se aprecia en su numeral 2:
2. What Do We Want In and From the World?
Achieving these goals requires marshaling every resource of our national power. Yet this strategy's focus is foreign policy. What are America's core foreign policy interests ? What do we want in and from the world?
We want to ensure that the Western Hemisphere remains reasonably stable and well-governed enough to prevent and discourage mass migration to the United States; we want a Hemisphere whose governments cooperate with us against narco-terrorists, cartels, and other transnational criminal organizations; we want a Hemisphere that remains free of hostile Foreign incursion or ownership of key assets, and that supports critical supply chains; and we want to ensure our continued access to key Strategic locations. In other words, we will assert and enforce a "Trump Corollary" to the Monroe Doctrine...
El subrayado es mío.
Luego aborda la necesidad de no permitir el poder de 'actores extranjeros' que agredan intereses económicos de EE.UU. en el Indo Pacífico, la restauración o fortalecimiento de la libertad y la seguridad como 'valores' occidentales y europeos. También genera una crítica a la Europa en crisis y decadencia de sus valores; tal cual lo había hecho el director del 'Departamento de guerra' a inicios de año en reunión con los líderes occidentales.
Como se ve en el subrayado, dice enfocarse en la lucha contra el narco-terrorismo y el crimen internacional. además, señala la palabra "corolario" que tiene relación directa con el "Corolario Roosevelt", pero referida como un "corolario Trump". Hay que recordar que, en 1904, un año luego de ser separada Panamá de Colombia -de lo cual hay todo un debate historiográfico- el presidente Theodor Roosevelt emitió una modificación o enmienda a la Doctrina Monroe que señalaba la capacidad y derecho de EE.UU. de intervenir en los asuntos internos de cualquier Estado de la región, si éstos cometían faltas o comportamientos, no de gusto del gobierno estadounidense.
En aquella época, como ahora, 2025, Venezuela había sido amenazada de un bloqueo naval por parte de Alemania, Inglaterra e Italia, por una deuda que decían la nación caribeña había contraído en el siglo XIX. Roosevelt arbitró no por generosidad, sino para afirmar que mandaba en su zona.
Entonces, el corolario Trump, a partir de mentiras, se abroga el derecho a intervenir en Venezuela porque señala alevosamente a tal nación de narcoterrorista, de ser la que inunda a Estados Unidos de droga. Por lo mismo, lleva más de tres meses asesinando a personas que sin juicio ni requisa se les bombardea o 'dronea' a más de mil millas de las costas estadounidenses.
Vuelvo por donde empecé. Trump hace este movimiento agresivo, luego de confirmar que el mundo es tripolar - multipolar. Que sus amenazas y aranceles tienen más calidad de efecto boomerang, donde además consolida los lazos de las tres potencias RIC. No en broma, pero sí con mucha ironía se empezó a decir que Trump logró si no la paz, sí el acercamiento más efectivo entre China e India, jamás logrado. Fuerza con ello la desdolarización, acentúa el impulso a BRICS+ a la Organización de Cooperación de Shanghái, OCS y las bancas del Sur Global -Banco BRICS -BAII- que ya en presupuesto eclipsan al FMI y al BM y sus sucursales regionales tipo BID.
Así las cosas, Europa es un vasallo rebelde a la espera de un cambio de régimen presidencial republicano en EE.UU.; el sur de Asia y la región de la península arábica desde Siria a Yemen y desde Palestina a Irak, más África se encuentran en tensión y disputa con China y Rusia y en cierta medida con Irán.
Pero América Latina y el Caribe, tal cual lo he señalado en artículos anteriores, está siendo llevado al redil gringo mediante cambios de régimen con injerencia directa en elecciones presidenciales y parlamentarias, como en Bolivia, Perú, Ecuador, Argentina, Chile y Honduras. El vasallaje de las Antillas menores está garantizado, así como el dominicano y puertorriqueño, inevitable como 'Estado Libre Asociado'.
Quedan básicamente: Cuba, Nicaragua, México, Colombia y Venezuela, como países susceptibles del nuevo corolario Trump. Pero no hay que olvidar las pretensiones sobre Groenlandia y sobre el Canal de Panamá. Cuba ha resistido, quizá ya no tanto de forma heroica sino inevitable, inercial, pero hay una sombra de derrota por estrangulamiento; de lo cual deseo como señalo en el artículo que escribí al respecto, sea rescatada por China y Rusia y el ímpetu de BRICS+.
El actual bloqueo naval a barcos cargueros de petróleo venezolano -luego del secuestro de un super carguero con dirección a Irán- y bajo mentiras como el supuesto robo de petróleo estadounidense por parte de Venezuela, que ya no resisten ninguna refutación documentada por la estupidez y falta de base histórica y legal, hacen necesario recordar que el Caribe es una zona compleja. Constituye un mundo, un ecosistema propio. Al punto que la teoría geopolítica de Nikoláy Spykman, de zonas de injerencia y seguridad estadounidense la definen como "Mediterráneo Americano". Como se aprecia en el siguiente mapa tomado de La geopolítica de Nikolas Spykman, de José López:
01
Es visible que toma todo el sur de Estados Unidos, y como mencioné, el Caribe se integra -aunque no se refiera- de la costa norteamericana. Además, abarca toda Centroamérica y las costas de Sudamérica desde Colombia hasta Surinam y Guyana Francesa. Esto implica que el Mediterráneo Americano no sólo es el litoral, sino las selvas, el cinturón guyanés, el petróleo, el pacífico y la selva de la Orinoquía. Colombia además hace parte de la región 'Zona amortiguadora de América del Sur'; lo que conecta más a profundidad las regiones amazónicas y todo su potencial.
Ahora veamos el siguiente mapa, tomado de mapamundis, donde se aprecia que la disposición geopolítica de N. Spykman es totalizadora y en mi concepto eficiente, pues integra al Golfo de México, mientras muchos mapas del Caribe lo omiten:
02
El Caribe y el Golfo de México dentro de un contexto geográfico y oceanográfico técnico, no comparten las mismas corrientes oceánicas, se delimitan por las islas y las costas de América central y del Sur; además la influencia de la colonización histórica del Caribe, varía respecto a la hispánica predominante en la América continental.
Sin embargo, los barcos estadounidenses están apostados en República Dominicana, Puerto Rico, Trinidad y Tobago. Esto los posiciona a 370 kilómetros de la Península de Paraguaná, Estado de Falcón, Venezuela. Estos barcos están a 500 kilómetros del sur de Cuba e igual de Nicaragua y a 100 o 200 kilómetros de Panamá. Con esto quiero decir que debe contemplarse la imprevisibilidad de Donald Trump y la tendencia anti revolucionaria del secretario de Estado, Marco Rubio; lo que pone en mi concepto una avanzada militar no sólo sobre Venezuela sino sobre cualquier punto del Caribe, incluida Colombia. No hay que olvidar que también señaló Donald Trump, que van a cambiar las operaciones marítimas a tierra. Con esto quiero señalar que no sólo se afecta a Venezuela, sino a todo el litoral Caribe. Donde además las dinámicas de pesca y la cotidianidad marítima y aérea se alteran.
Atacar o atacar
Los costos de tener estos barcos y tropas en el Caribe, equivalen a 10 millones de dólares al día. Están desde agosto. Esto son más de 1400 millones de dólares. ¿Por qué vale la pena este gasto ? ¿Por qué le es un imperativo inevitable exhibir una demostración de fuerza letal?
- Estados Unidos ya no es una potencia marítima o está muy cerca de dejar de serlo. Tampoco es la gran potencia global; pues como se vio, está renunciando desde su propia doctrina de seguridad a tal condición.
- Estados Unidos se concentró desde 1991 en el Golfo Pérsico e inició el plan de cambio de régimen en al menos 7 países de tal región y África, desde Irak, Afganistán, Siria, Libia hasta Irán, la joya de la corona no alcanzada hasta ahora.
- Lo anterior la distrajo de su zona de influencia directa, que también evidenció que Estados Unidos estaba quizá perdiendo una doctrina estatal de proyección de poder, al cambiarse las prioridades según el gobierno, demócrata o republicano, como se puede ver más claramente con la postura frente a China y Rusia. Obama también en su momento miró hacia el Caribe y sostuvo una estrategia de Soft Power para sacar a Cuba del socialismo, abriendo a la isla y visitándola. Trump revirtió esto e impuso sanciones agresivas reviviendo la ley Helms-Burton, si es que alguna vez se fue.
- El afloramiento de las dos olas progresistas postsoviéticas en América Latina y el Caribe permitió el asentamiento de China y Rusia en la subregión -fuertemente Venezuela, Brasil y Nicaragua-; en donde la potencia asiática es la primera o segunda inversora. Lo que llevó al copamiento de gobiernos que hoy es difícil por más que lo deseen, salirse de tal órbita. Para el caso, Argentina con su nefasto y repugnante remedo de presidente anti comunista, pero pactando con China.
- De lo anterior hay un libro que ya he citado otras veces por ser la expresión más clara de lo que pasa hoy en el Caribe, titulado, Competencia y conflicto entre grandes potencias en América Latina, de RAND Corporation, 2023. Esto quiere decir que lo que está pasando en el Caribe, no se improvisa o al menos existe bajo una agenda prospectiva superior a los partidos en el poder. Lo anterior, no se contradice con el punto 3; más bien matiza la complejidad de planes y alternativas que se tejen desde el Estado profundo ante las debacles que van monitoreando: sino sale la 'derrota estratégica de Rusia' también delimitada por la propia RAND en un texto llamado Extending Russia, -de 2019- entonces vamos por nuestro 'espacio vital' spykmaniano.
- Los estadounidenses se quedaron anclados en su visión de hegemonía de Guerra Fría y además traicionan como buenos piratas las normas de 'mercado libre'. Esto los lleva a pelear por conservar su poder de maneras grotescas y violentas. Asunto paradójico en una nación que omite constantemente su historia, verla revivir a su vieja doctrina hegemónica como última melancolía de su grandeza en declive: la Doctrina Monroe.
- Estados Unidos es más caribeña y sureña, pues ha devenido en una línea subdesarrollada en su infraestructura, ciencia, educación, economía real, innovación y salud pública. Lo que expuse en un artículo titulado, André Gunder Frank: El subdesarrollo del desarrollo avanza en occidente. Esto quiere decir que el pulso que no puede ganar en Asia o Ucrania o India, lo ejerce como matón de barrio con los mediocres ejércitos que están por debajo del nivel estadounidense, encontrándose este último por debajo de los ejércitos ruso y chino.
- Ronald Reagan señaló en su momento que había que hacer demostraciones de fuerza no sólo para amedrentar a sus vasallos subversivos sino para afirmar la confianza de sus aliados o de los lacayos leales. Esto implica que, por ejemplo, luego de recibir una paliza en Beirut, Líbano, donde fueron asesinados 241 soldados estadunidenses, el 23 de octubre de 1983, ordenó la invasión a Granada, una pequeña isla en el Caribe que saltó al socialismo de la mano de Maurice Bishop, dos días luego, con una cobertura mediática que nunca refirió la asimetría de fuerzas y capacidades.
- Las reservas petroleras de Venezuela y otros recursos estratégicos, le vendrían bien a EE.UU. en su competencia con China y Rusia, máxime cuando los desarrollos de tecnología e I.A. requieren de fuentes energéticas de gran potencia.
- Por lo anterior: Estados Unidos de América con sus diversas formas de auto referencia, la ciudad que brilla sobre la colina, el policía del mundo, la nación indispensable, ESTÁ obligada a llevar a cabo algún tipo de operación en el Caribe. No tiene que ser necesariamente contra Venezuela; aunque golpeando a ésta golpeará a Cuba y Nicaragua y también no sólo a la Colombia de Petro sino la que éste podría legar con el candidato Iván Cepeda.
- La presión ejercida a Maduro, la insistencia en cambio de régimen, busca fracturas dentro de las élites militares, políticas e industriales venezolanas y un poco probable alzamiento de la población.
- No creo que sólo se dedique a hacer presión con los asesinatos de lancheros en el mar o a efectuar secuestros y bloqueos navales. Esto es parte del calentamiento. Una potencia que se ve a sí misma como lo que fue en y ganando la Guerra Fría, que nombró su ministerio de defensa y el Pentágono como Ministerio de Guerra, tendrá que dar un golpe. Difícilmente avanzará con tropas en el terreno. Su índice de popularidad es de menos de 30%. No puede mandar a morir a sus jóvenes.
Por tales razones considero que Estados Unidos deberá golpear algún lugar del Caribe. Si no lo hace, demostrará que ya no es una potencia y no es un padrino fiable a sus élites nacionales con inversión en la subregión ni de las élites de tales países. Estamos ante la caída o mantenimiento de esa imagen de potencia al menos regional. Como de costumbre, poco o mucho, Trump lo venderá como un hecho monumental, 'fantástico', que salvó a EE.UU. de las drogas. Así se comportan las naciones dominantes en decadencia. ¿Logrará quedarse con todo o una parte del petróleo venezolano ? ¿Qué saben de esto la inteligencia rusa y china?